El PRINCIPIO DEL FINAL
Te extrañé tanto que podía oír nuestro recuerdo
Mientras comíamos dulces,
Mientras tu dulzura se consumía.
Ahí fue donde recordé aquel eterno invierno
Donde dijiste te tengo pero ya no eres mía,
Entonces mi corazón latía
Mientras por dentro se moría
El grito mudo de mi voz, de mis labios no sabía
¡Quédate! ¡Quédate! Me hacía trizas
Hasta que entendí…
Que solo me queda extrañar tu sonrisa
Manuela Estrada – 10A